
¿QUÉ ES LA DISPRAXIA?
El termino dispraxia o síndrome del niño
torpe, también conocido como trastorno
del desarrollo de la coordinación se utiliza para describir las dificultades en
el desarrollo de las destrezas motoras. No se conoce la causa, sin embargo, se
sabe que las dificultades surgen en el procesamiento de la información entre el
cerebro y el cuerpo, lo que afecta a la habilidad del niño para moverse de
manera efectiva. (KULUNKA, asociación para la atención a niños con alteraciones
del desarrollo).
El origen etimológico de la palabra nos da las
claves para saber en qué consiste esta enfermedad. El prefijo dis- señala
dificultad o anomalía y la palabra de origen griego praxis significa práctica.
Es decir, la dispraxia haría referencia a la dificultad para realizar con
coordinación ciertas tareas, desde llevar a cabo movimientos elementales hasta
tener dificultades en el habla.
La dispraxia es un desorden mental común que afecta con severidad al 2 por ciento de los británicos pero cuyos síntomas se pueden ver en, aproximadamente, el 10 por ciento de la población de este país. Los varones son los más afectados al padecer esta enfermedad cuatro veces más que las mujeres.
Tipos
de dispraxia:
Aunque
el término ‘dispraxia’ hace referencia principalmente a incoordinación motora,
este problema puede afectar a varias áreas y niveles, como el lenguaje o el
desarrollo emocional, según la doctora María Teresa Romero Rubio,
(pediatra) da lugar a diferentes tipos
de dispraxia:
a) Dispraxia
ideomotora:
Existe una interrupción
entre la secuencia de pensar y realizar un acto sencillo, como por ejemplo
coger un objeto, como un peine.
b) Dispraxia
ideatoria:
Se afecta la cadena de
secuencias de pasos sencillos que dan lugar a uno complejo: abotonar un botón,
atarse los cordones, meter una llave en la cerradura.
c) Dispraxia
oromotora o del habla:
En este caso se ven
afectados los grupos musculares que se encargan de la fonación, mostrando
problemas para pronunciar algunas palabras o sílabas, por lo tanto el habla del
niño se moverlos de un lugar a otro: por ejemplo, meter una caja pequeña dentro
de otra más grandes se verá afectada.
d) Dispraxia
constructiva:
Existe una dificultad en comprender
las relaciones espaciales entre los objetos, por lo que resulta difícil.
Según el periódico
Daily Mail, Daniel Radcliffe, el actor británico que
interpreta en la gran pantalla al famoso mago Harry Potter, sufre dispraxia,
un desorden neurológico que consiste en la dificultad para realizar con
coordinación ciertas tareas, por ejemplo, llevar a cabo determinados
movimientos elementales o incluso en el habla. De acuerdo con la
Organización Mundial de la Salud, afecta a cerca del 6 por ciento de
los niños, aunque Dyspraxia USA afirma que otras entidades creen que esa
cifra podría alcanzar hasta el 10 por ciento.
interpreta en la gran pantalla al famoso mago Harry Potter, sufre dispraxia,
un desorden neurológico que consiste en la dificultad para realizar con
coordinación ciertas tareas, por ejemplo, llevar a cabo determinados
movimientos elementales o incluso en el habla. De acuerdo con la
Organización Mundial de la Salud, afecta a cerca del 6 por ciento de
los niños, aunque Dyspraxia USA afirma que otras entidades creen que esa
cifra podría alcanzar hasta el 10 por ciento.